Yo contesté:
«Dios de Israel,
yo sé que tú buscas gente honesta.
Pero este pueblo es muy terco
y más duro que una roca;
no ha querido arrepentirse.
Por eso lo has castigado,
pero parece que no le dolió;
y aunque lo has aplastado,
no ha querido hacerte caso.
Jeremiah 5:3